De la capital de valle del Jerte a la sierra de Béjar por el valle de Ambroz
Esta ruta sobre el antiguo ferrocarril Plasencia-Astorga deja un buen número de atractivos entre las provincias de Cáceres y Salamanca pues atraviesa un territorio frondoso y muy diverso. Se extiende desde Plasencia, capital del Jerte por la comarca del valle del Ambroz y los pastos ganaderos, pasando por dehesas y bosques de hoja caduca hasta llegar al piedemonte de la sierra de Béjar declarada Reserva de la Biosfera. Y por si esto fuera poco: antiguas estaciones recuperadas con nuevos servicios turísticos, elementos ferroviarios a lo largo del camino, atractivos pueblos y la cercanía de los vestigios de la calzada romana entre Augusta Emerita (Mérida) y Asturica Augusta (Astorga) -que da nombre a la “Vía de la Plata”- ponen la guinda a un itinerario sin desperdicio.
Historia de la vía verde
La vía verde de la Plata es un recorrido que tiene mucho significado. Tenemos que remontarnos a tiempos remotos, donde no existían las carreteras ni los trenes. En esos tiempos, cuando las tribus nómadas necesitaban desplazarse del norte al sur de la península, lo hacían a través del valle del Ambroz.
De ahí que, cuando caminemos por esta vía y hagamos este recorrido, podamos sentir la conexión con un camino ancestral, que es el que siguieron nuestros antepasados, en sus idas y venidas, hasta crear asentamientos y poblaciones estables.
Posteriormente, los romanos, crearon la vía de la Plata, una calzada que unía la península de norte a sur, por la parte oeste, siguiendo un recorrido parecido al que siguieron de forma natural las antiguas tribus nómadas, en sus desplazamientos por el valle del Ambroz.
En 1896 se habilitó un ferrocarril con recorrido Palazuelo – Astorga que se conocía como el tren de la vía de la Plata, porque gran parte de su recorrido, avanzaba paralelo a la antigua calzada romana.
En la actualidad, ese tren ya no existe. Se han desmantelado parte de sus vías. Y se han aprovechado las estructuras que se construyeron, para crear un camino recto y con poca pendiente, para facilitar una vía verde cómoda y fácil de transitar.
Además, y como dato curioso, la vía verde forma parte de la Eurovelo 1, una ruta en bicicleta, que permite recorrer Europa, desde Noruega hasta Portugal, a través miles de kilómetros de carril bici.
Esta ruta ha sido diseñada para ser recorrida de manera sencilla, ya sea en bicicleta o a pie. A lo largo del trayecto, se encuentran diversas instalaciones que brindan servicios esenciales como restaurante, aseo y áreas de descanso.
La vía verde ha revitalizado las antiguas estaciones de ferrocarril a lo largo de su recorrido, convirtiéndolas en puntos estratégicos para ofrecer comodidades a turistas y viajeros. En total, a lo largo del camino nos encontramos con cuatro estaciones.
Al iniciar la ruta en sentido sur – norte desde Plasencia, se encuentra un acogedor área de descanso ideal para hacer un picnic y recargar energías.
Continuando, nos topamos con otra área de descanso, la antigua estación de Gargantilla, equipada con mesas para descansar y disfrutar del entorno.
A pocos kilómetros en dirección norte, llegamos al núcleo urbano más destacado del Valle del Ambroz, Hervás. Este lugar ofrece numerosas opciones de bares y restaurantes, donde puedes disfrutar de unas cervezas o un café mientras te sumerges en el encanto del entorno.
Continuamos nuestra y encontramos la antigua estación de Baños de Montemayor. Hay Un merendero lleno de sombra, donde parar a reponer fuerzas y comer unos bocadillos.
Siguiendo el camino, encontramos la estación de Puerto de Béjar, también conocida como la pequeña estación. Ha sido rehabilitada como un restaurante, punto de encuentro de ciclistas, que conserva gran parte de los vagones y las instalaciones antiguas y tiene mucho encanto.
Y por último, llegamos a Béjar y allí está la estación, que también es un restaurante muy concurrido por turistas, por ser el final de la ruta, o el principio si se recorre en sentido contrario.
Tramos – distancias y dificultad
Tramo Navalmoral de Béjar – Béjar Distancia: 5.9 km –Dificultad: ligeramente descendente
Tramo Antigua estación de tren de Béjar – Cantagallo Distancia: 5.5 km –Dificultad: Prácticamente llano Tramo
Tramo Cantagallo – Puerto de Béjar Distancia: 3.6 km –Dificultad: Llano
Tramo Puerto de Béjar – Antigua estación de Baños de Montemayor Distancia: 5 km –Dificultad: Desnivel favorable
Tramo Baños de Montemayor – Hervás Distancia: 7.5 km –Dificultad: Pendiente pronunciada
Tramo Hervás – Casas del Monte Distancia: 14,5 km –Dificultad: No hay dificultad
Tramo Casas del Monte – Plasencia Distancia: 24,0 km –Dificultad: Moderada
Vía verde con niños y mascotas
Una de las ventajas de la Vía Verde de Hervás es que es completamente llana, lo que la convierte en una ruta ideal para los ciclistas principiantes o para aquellos que quieren disfrutar de un paseo relajado en bicicleta. Además, está asfaltada y bien señalizada, lo que la hace fácil de seguir.
Si vamos con perros, lo mejor es llevar la correa, aunque se estén sueltos en algunos tramos. Pero así se evitan encuentros desagradables y malos entendidos. La ruta está abierta para todo el mundo y hay personas y niños que aún no toleran bien a los perros o se asustan. Y también hay tránsito de bicicletas. Atándolos un momento, se soluciona todo fácilmente.
Otra ventaja de la Vía Verde de Hervás es que está llena de lugares para detenerse y disfrutar, como áreas de picnic, parques infantiles y bares. Esto la hace perfecta para un día en familia, ya que se puede hacer una parada en cualquier momento para descansar o tomar una bebida.
Para aquellos con niños pequeños, es recomendable llevar un remolque o una bicicleta con sillín para niños. De esta manera, los más pequeños pueden disfrutar del paseo sin cansarse demasiado. También es recomendable llevar agua y alimentos, ya que no hay muchos lugares para comprar comida durante el recorrido.
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